05/03/2009
El beneficio de Ruralcaja se reduce un 59%, tras las dotaciones para insolvencias
Ruralcaja obtuvo en 2008 un beneficio neto de 22,9 millones de euros, un 59,5% menos que en el ejercicio anterior, después de realizar dotaciones netas para insolvencias por 65,56 millones de euros, un 88% más que en 2007, “priorizando absolutamente el mantenimiento de la solvencia”, según un comunicado hecho público por la Entidad.
En este sentido, el mismo comunicado resalta que al finalizar 2008 los recursos propios de Ruralcaja se elevaban a 725 millones de euros, con un coeficiente de solvencia del 11,7%, lo que representa un exceso de 3,7 puntos porcentuales respecto a los recursos propios mínimos exigibles por el regulador.
A 31 de diciembre de 2008, los activos totales de Ruralcaja estaban situados en 8.869 millones de euros, un 0,54% más respecto a la misma fecha del año anterior. El volumen total de negocio se situó en 15.821 millones de euros, tras un descenso en el ejercicio del 1,22%, después de aumentar la inversión crediticia en 305 millones de euros, un 3,8%, y de disminuir el volumen administrado de recursos de clientes en 359 millones de euros, un 4,9%.
A pesar del drástico cambio de coyuntura acontecido a lo largo de 2008, que ha dado lugar a una fuerte ralentización de la demanda solvente de crédito, Ruralcaja afirma haber mantenido abiertas todas las líneas de financiación a particulares y a empresas, habiendo concedido durante el ejercicio un total de 51.040 operaciones por un importe de 1.927 millones de euros.
Los depósitos de clientes se situaron, al finalizar el ejercicio, en 6.672 millones de euros. La disminución de recursos de clientes refleja, según la entidad, la fuerte competencia en el sector por la captación de recursos minoristas, “una guerra de precios”, dicen, en la que Ruralcaja ha renunciado a entrar “a partir de determinados niveles”.
Con todo, la tendencia generalizada al incremento de los tipos de interés pagados por las entidades para retribuir los depósitos de sus clientes, unido a un empeoramiento en la estructura de dichos depósitos con un aumento del peso del ahorro a plazo, en detrimento de las posiciones a la vista, motivó un encarecimiento del coste de financiación de Ruralcaja, que se trasladó al margen de intereses, situado en 194 millones de euros, con un descenso del 2,85% respecto al ejercicio anterior. Esta disminución del margen se ha trasladado al resto de los márgenes, registrándose un margen bruto de 230,96 millones de euros, un 3,12 % menos del obtenido en 2007.
Pero, sin duda, el peor de los datos de la entidad fue la morosidad, que alcanzó el 6,22%, la más alta publicada hasta ahora, aunque la caja rural ha sufrido tasas de morosidad del 10% en anteriores crisis. Las principales causas de la morosidad han sido los concursos de acreedores en empresas relacionadas con el sector inmobiliario y el impago de préstamos hipotecarios y personales, como consecuencia del incremento de la tasa de paro.
La entidad, en todo caso, cuenta con una confortable situación de liquidez debido a las líneas abiertas establecidas mediante los siguientes recursos: Línea de crédito en stand by, subasta al Banco Central Europeo, FAAF, Emisiones con avales del Estado.
517 oficinas y 1.940 empleos
Ruralcaja dispone de una red de 517 oficinas, de las que 27 se han aperturado en 2008, concretamente 14 en la Comunidad Valenciana, 10 en Murcia y 3 en Cataluña. Durante el año pasado la Entidad creó 82 nuevos puestos de trabajo, ascendiendo el número total de empleados a 1.940.
La caja rural destinó el año pasado 5,4 millones de euros a su compromiso social, dirigido a la formación continua de su equipo humano y a las actividades organizadas por sus Fundaciones.
