26/02/2009
El pleno del Parlamento Europeo aprueba por amplia mayoría el Informe Toia, de reconocimiento de la economía social
El Parlamento Europeo, en su sesión plenaria del pasado 19 de febrero, aprobó con 580 votos a favor, 27 en contra y 44 abstenciones el informe elaborado por la europarlamentaria italiana Patrizia Toia de reconocimiento y fomento de la Economía Social. Con la aprobación se culmina un importante recorrido iniciado por la parlamentaria en el último trimestre del año pasado, recorrido que ha servido para trasladar a los miembros del Parlamento la importancia de las empresas de economía social y, a su vez, para que el propio Parlamento, con su aprobación, traslade al resto de instituciones de la Unión, en particular a la Comisión Europea, así como a los Estados miembros, la necesidad de aumentar el fomento de este tipo de actividades económicas, dentro de un marco de economía plural.
El Informe define a la economía social como un modelo de empresa que no se caracteriza por el tamaño o el sector de actividad, sino por los valores comunes que comparten sus diferentes componentes. Muestra a la economía social como una realidad incuestionable de la sociedad europea tanto por su peso en la economía como por su papel en la construcción europea. Se estima que un 10% de las empresas europeas (2 millones en total) son de economía social. En conjunto emplean al 6% de la población del continente.
Asimismo, el Parlamento destaca que la economía social contribuye a un crecimiento estable y duradero, fortaleciendo el modelo social europeo. El Informe pide expresamente a la Comisión que defienda el concepto de la economía social como un “enfoque diferente de la empresa”, cuyo motor principal no es la rentabilidad financiera sino los beneficios para toda la sociedad.
Reconocimiento jurídico y como interlocutor social
El Informe pone especial énfasis en solicitar que la Comisión Europea tenga en cuenta las características de la economía social en la elaboración de políticas públicas. En este aspecto, el Parlamento solicita a la Comisión que las empresas de economía social “no estén sujetas a la misma aplicación de las normas de competencia” que otras empresas, y que elabore “un marco jurídico seguro”, que incluya un Estatuto Europeo para asociaciones, mutualidades y fundaciones, como el que ya existe para las cooperativas.
A través del Informe el Parlamento Europeo se manifiesta a favor de que la economía social “se reconozca en el diálogo social europeo sectorial e intersectorial” y sugiere que tanto la Comisión como los Estados miembros “impulsen enérgicamente el proceso de inclusión de los agentes de la economía social en la concertación social y en el diálogo civil”.
Mayor visibilidad y reacciones del sector
El Informe pone también de manifiesto que la economía social es un sector poco conocido, por lo que pide a la Comisión y a los Estados miembros que establezcan cuentas satélite nacionales por sector institucional y por sector de actividad, y que permitan la introducción de estos datos en Eurostat. Como ya se ha informado en reiteradas ocasiones en este Observatorio, CIRIEC ya realizó para la Comisión Europea el Manual para la elaboración de una cuenta satélite de la economía social, instrumento que puede servir de base para la recopilación de las estadísticas requeridas.
El sector ha recibido con una elevada dosis de satisfacción la aprobación del Informe Toia por parte del Parlamento Europeo, puesto que supone un impulso importante, a nivel continental, en el reconocimiento del conjunto de empresas que lo componen. En el ámbito español, la Confederación Empresarial Española de la Economía Social (CEPES) ha emitido un comunicado en el que valora “muy positivamente” este informe, ya que en él se reconoce “no sólo que la Economía Social debe ser un actor empresarial en la Unión Europea, sino que llama la atención a las Instituciones Comunitarias de la necesidad de generar un marco jurídico de la Economía Social basado en el reconocimiento de los valores específicos de esta forma de hacer empresa”.