03/01/2008
La profesora canadiense Marie Bouchard destaca la importancia de la colaboración universidad-empresa en las investigaciones en economía social
La profesora Marie Bouchard, titular de la Cátedra en Economía Social de la Universidad de Québec, destacó la importancia de la colaboración universidad-empresa en las investigaciones en economía social, una colaboración que, en su opinión, beneficia tanto al colectivo investigador como al propio sector, ya que pone en valor tanto la calidad de las investigaciones como las positivas aportaciones de esta forma de hacer empresa en el entorno en el que se desenvuelven.
Bouchard participó el pasado mes de diciembre en el Encuentro Internacional de Institutos y Centros Universitarios de Investigación en Economía Social ENUIES 2007, donde explicó la experiencia de ARUC ES, Alianza de Investigación Universidad-Comunidad en Economía Social. Dicha alianza, fundada en 1999, la componen un consorcio de cuatro universidades canadienses y once organizaciones de la economía social de aquel país, que coordinan cinco grupos de trabajo sobre temas como los servicios sociales a las personas, la vivienda, la financiación y el desarrollo local y regional, y el turismo social.
Para Marie Bouchard, el fin último de esta alianza es poner en valor tanto las investigaciones como las aportaciones del propio sector al desarrollo de las comunidades. Y puso como ejemplo las últimas investigaciones realizadas por la Alianza sobre temas de vivienda social, cuyos resultados han motivado el reconocimiento del sector por parte de los ministerios competentes en la materia.
Autonomía universitaria
La profesora indicó, asimismo, que la Alianza funciona con total respeto a la independencia investigadora de las universidades, un requisito indispensable para poder desarrollarse. El aprendizaje mutuo de cada uno, investigadores y actores de la economía social, es otro de los resultados positivos de esta experiencia. A menudo, universidad y empresa se desconocen, y es a través de este tipo de alianzas donde pueden mejorar sus relaciones.
En su exposición, Bouchard no dejó de citar algunos riesgos de esta relación, como la instrumentalización por parte de los actores, y el riesgo de tener un rechazo de los actores por excesiva teorización, por la lentitud de las investigaciones o la necesidad de tener resultados inmediatos. No obstante, la profesora opinó que la investigación debe evolucionar hacia una mayor contextualización, hacia la interdisciplina y la reflexividad.
Ello son condiciones para una investigación de calidad, creíble e independiente, justo lo que necesita el sector de la economía social para aumentar su visibilidad y su capacidad de negociación con los poderes públicos. Marie Bouchard concluyó, por ello, que los actores deben demandar más investigación en economía social.
Imagen: Marie Bouchard.