16/07/2020

Grupo Eroski volvió a mejorar resultados en 2019, mientras continúa reduciendo su deuda financiera

Eroski celebró el 15 de julio su Asamblea General Ordinaria anual en Barakaldo (Bizkaia), a la que estaban convocadas 500 personas socias representantes de sus colectivos de Socios Trabajadores y Socios Consumidores. Su presidente, Agustín Markaide, repasó el momento por el que pasa la cooperativa de distribución del grupo Mondragón.

Markaide recordó que 2019 fue un año con importantes decisiones en el ámbito societario. “Hemos alcanzado un acuerdo sólido para la reestructuración financiera y la aprobación de la nueva Ley de Cooperativas de Euskadi ha supuesto un avance que posibilita al movimiento cooperativo mantener nuestra esencia adaptándonos al futuro, además de establecer un marco normativo más claro”. En el ejercicio 2019, Eroski redujo en 263 millones de euros su deuda financiera, habiendo aminorado la deuda desde 2010 en cerca de 1.900 millones de euros.

También destacó el crecimiento de los beneficios operativos del grupo, hasta alcanzar los casi 194 millones de euros, “el mejor resultado de la historia del grupo Eroski en relación con las ventas, lo que confirma la solidez de la evolución del grupo”. Unas cuentas, tanto las anuales individuales de la cooperativa como las consolidadas del grupo Eroski, que la Asamblea General aprobó, así como el Informe de Gestión del ejercicio 2019.

Eroski es el primer grupo de distribución de carácter cooperativo de España y segundo operador de distribución alimentaria en el Norte, concretamente en las regiones de Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, La Rioja, Navarra, Aragón, Cataluña y Baleares. Cuenta con una red comercial de 1.645 establecimientos, entre supermercados, hipermercados y cash & carry, además de gasolineras, ópticas, oficinas de viajes y tiendas de equipamiento deportivo. Cuenta con más de 6 millones de Socios Clientes y más de 32.000 socios cooperativistas, trabajadores y franquiciados. El grupo inauguró 74 nuevas tiendas en 2019, entre franquicias y tiendas propias.

72 millones de euros a reservas

Durante la Asamblea los socios aprobaron también las modificaciones de los estatutos sociales de Eroski, S. Coop. para adaptarlos a la nueva Ley de Cooperativas de Euskadi, aprobada el pasado mes de diciembre.

Además, el máximo órgano de decisión de la cooperativa acordó destinar a reservas los más de 72 millones de euros de beneficios alcanzados por la cooperativa matriz en el ejercicio 2019, y así reforzar los fondos propios, al igual que en años anteriores. Esta decisión se alinea con los cambios introducidos en 2018 en el Congreso de Mondragón, al aprobarse la ponencia de distribución de resultados para el reforzamiento de recursos propios, normativa aplicable a todas las cooperativas a partir de los resultados del ejercicio 2019.

Asimismo, los socios y socias cooperativistas presentes dieron su aprobación a la creación de la fundación que gestionará el fondo de cooperación que decidió constituir la asamblea del año pasado. Este fondo servirá para ayudar en el futuro a los socios que así lo necesiten a realizar la aportación al capital social necesario marcado en los estatutos de la cooperativa. “Una muestra de la solidaridad que emana de nuestros principios cooperativos”, afirmó Agustín Markaide.

Proceso participativo previo

La asamblea culminó un amplio proceso de participación previa de los Socios Trabajadores y Socios Consumidores de Eroski que, en su organización, han integrado las medidas de prevención y seguridad ante la Covid-19, sumando numerosas sesiones informativas, entre ellas 30 juntas preparatorias con conexiones digitales a 135 puntos y la intervención de 5.400 personas socias trabajadoras y casi 15.000 personas socias consumidoras.

La presidenta del Consejo Rector de Eroski, Leire Mugerza, recordó que tras 50 años de trabajo cooperativo el modelo de gobernanza de Eroski, “está demostrando su eficacia y ha contribuido de forma determinante a que la cooperativa sea hoy un referente en el sector y nuestras señas de identidad estén ampliamente reconocidas, como organización solidaria y comprometida con la salud y el bienestar social. Hemos construido nuestro proyecto sobre la base de la proximidad a las personas consumidoras, que han sido las catalizadoras de nuestro trabajo y actuaciones, para poder adaptarnos a sus necesidades y hábitos de consumo. Algo que cobra, si acaso, más relevancia en los tiempos de crisis sanitaria que nos está tocando vivir actualmente y que ha revelado que nuestras singularidades como organización nos han permitido abordar una situación de incertidumbre con fortaleza. Es por ello que quiero agradecer a todas las personas que integran este proyecto por haber orientado su esfuerzo en beneficio de la colectividad, en tiempos donde más necesario ha sido”.