Actualidad del Observatorio Español de la Economía Social

25/05/2017

La Declaración de Madrid suma a nuevos países europeos en la reivindicación de políticas prioritarias para la economía social

Los Gobiernos de 11 países de la UE firmaron durante la Cumbre Europea del pasado 23 de mayo la ‘Declaración de Madrid’, por medio de la cual reivindican un fuerte impulso de la Economía Social en la agenda política de la UE, al considerarla un modelo empresarial prioritario para un futuro sostenible.

La Declaración “La Economía Social, un modelo empresarial para el futuro de la Unión Europea”, fue firmada por los Gobiernos de España, Luxemburgo, Portugal, Grecia, Italia, Rumanía, Eslovenia, Malta, Bulgaria, Chipre y Suecia.

Los países firmantes, a los que próximamente pueden sumarse otros, solicitan a la Comisión Europea que la Economía Social ocupe un lugar prioritario dentro de las políticas comunitarias y “medidas concretas” a favor de su desarrollo.

La Declaración empieza recordando que en la actualidad, y según datos de la Comisión Europea y el GECES, la Economía Social cuenta con 2 millones de empresas en Europa, que generan el 8% del PIB comunitario y dan empleo a cerca de 14,5 millones de personas.

Refleja que “los valores comunes de la Economía Social, como la primacía de las personas y el objeto social sobre el capital, la gobernanza democrática y/o participativa, la reinversión de la mayoría de los beneficios para asegurar la sostenibilidad a largo plazo de la empresa, y la prestación de servicios a sus miembros y a las comunidades locales contribuyen activamente a la cohesión social y por tanto, a un crecimiento innovador, inteligente, sostenible e integrador, además de a la creación de empleo de calidad”.

El documento recuerda como antecedentes las numerosas resoluciones que se han aprobado por distintas instancias europeas a favor de la economía social, entre ellas la Estrategia de Roma (noviembre de 2014); el Informe General 2016 del GECES, y las declaraciones de Luxemburgo (diciembre 2015), Bratislava (diciembre de 2016) y Liubliana (abril de 2017).

A partir de todo ello, la Declaración de Madrid se reafirma en la necesidad de que se apoye a las empresas de economía social “a través de programas, proyectos y fondos, y en el desarrollo innovador y sostenible de un ecosistema financiero adecuado”.

Desarrollar e implantar cuentas satélite

Los países firmantes destacan en la Declaración de Madrid “la importancia de desarrollar e implantar cuentas satélite, siguiendo los modelos internacionales comúnmente aceptados”, para determinar y hacer visible la contribución efectiva de las empresas de la economía social al crecimiento económico y a la cohesión social en la Unión Europea.

Y coinciden en que las políticas nacionales y europeas de apoyo al emprendimiento “deben tener en cuenta los modelos de la economía social como fórmula para la creación de un empleo inclusivo y una sociedad más justa, más equitativa y sostenible”.

La Declaración afirma también la necesidad de fomentar el emprendimiento bajo fórmulas de la economía social dentro de los planes de estudio en las diferentes etapas educativas, y expresa el deseo de promover mecanismos de coordinación de alto nivel para las políticas y medidas que se implementen a favor de la economía social.

El texto concluye solicitando a la Comisión Europea que incluya en su plan de trabajo para el año que viene un Plan de Acción Europeo 2018-2020, financiado adecuadamente, que promueva las empresas de la economía social en Europa y fomente la innovación social.

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