14/11/2013
La Asociación Española de Fundaciones (AEF) celebró un seminario sobre Buen Gobierno y prácticas de gestión en las fundaciones corporativas
“Hay que poner la necesidad de la transparencia y del buen gobierno al frente de las agendas de las fundaciones corporativas”, lo cual responde a “un gran compromiso” por parte de la Junta Directiva de la AEF. Así se manifestó el pasado 11 de noviembre el presidente de la Asociación Española de Fundaciones (AEF), Javier Nadal, en la inauguración del Seminario sobre Buen Gobierno y prácticas de gestión en las fundaciones corporativas, organizado por la AEF con la colaboración de la Fundación Iberdrola.
El seminario reunió en la Casa de América, en Madrid, a las fundaciones corporativas más representativas del país, para debatir sobre sus prácticas de gestión y de gobierno corporativo, y sobre la colaboración entre el mundo empresarial y privado y el fundacional.
Nadal incidió en el compromiso de la AEF de hacer que los órganos de gobierno de las fundaciones actúen con rigurosidad, seriedad y con un sentido de la responsabilidad, desde una “actitud generosa” por parte del patronato hacia el sector fundacional, con el objetivo de alcanzar un buen gobierno de las fundaciones corporativas.
Por su parte, Fernando Diago, patrono de la Fundación Iberdrola, llamó la atención sobre la importancia del desarrollo de la sociedad civil para la salida de la crisis, para lo que es fundamental la acción de las fundaciones, por lo que, según indicó, “urge dirigir las conductas, la transparencia y la ética de las organizaciones y de sus fundaciones”.
El patronato de las fundaciones corporativas
Durante la jornada, responsables de las fundaciones de algunas de las empresas más representativas del país –Fundación Adecco, Fundación Mapfre, Fundación Telefónica y Fundación Lealtad- posicionaron el papel del patronato de las fundaciones corporativas.
Por su parte, el director general de la AEF, Silverio Agea, expuso las funciones de la AEF, que actúa como “un paraguas” para impulsar el buen gobierno en las fundaciones corporativas, ser transparentes con la ciudadanía y resolver la problemática existente con los grupos de interés.
En este sentido, indicó que los instrumentos valiosos del buen gobierno son los estatutos, los principios y el código del buen gobierno, “algo que ilumina las actividades de la AEF”. Asimismo, informó que desde la AEF han dado “un paso más”, recomendando pautas y una determinada metodología para que las fundaciones se autoevalúen y desarrollen prácticas de buen gobierno.