07/02/2013
CEPES considera imprescindible una apuesta real por el empleo y el emprendimiento para los jóvenes
La Confederación Empresarial Española de Economía Social (CEPES) mantuvo el miércoles, 6 de febrero, una reunión con la secretaria de estado de Empleo, Engracia Hidalgo, y con el director general del Trabajo Autónomo, la Economía Social y la RSE, Miguel Angel García, para presentar al Gobierno una serie de medidas incentivadoras y de urgente aplicación que tienen como objetivo disminuir el altísimo porcentaje de desempleo juvenil que azota nuestro país. La reunión se celebró en el marco del diálogo que el Gobierno español ha abierto con los interlocutores sociales para la puesta en marcha de la Estrategia de Emprendimiento y Empleo Joven, un plan con medidas de choque para mejorar la empleabilidad de los jóvenes en España.
Según se informa desde la propia Confederación, por parte de CEPES asistieron a la reunión su presidente, Juan Antonio Pedreño, los vicepresidentes 1º, 2º y 3º, Fernando Marcén (Cooperativas Agro-alimentarias), Rafael de Lorenzo (ONCE) y Pedro Muñoz (Confederación Española de Mutualidades), respectivamente, y el consejero de CEPES representante de Confesal, Ruperto Iglesias.
El presidente de CEPES, Juan Antonio Pedreño, manifestó que el de los jóvenes es uno de los colectivos protagonistas de las más de 1.000 nuevas empresas de Economía Social que se constituyeron en el primer semestre del 2012, incrementando en un 30% los datos del 2011. “Estas nuevas empresas permitieron la creación de 15.000 nuevos puestos de trabajo”, informó Pedreño.
Economía Social como solución al desempleo
Estos datos, según se señala desde la propia Confederación “dejan patente que la sociedad confía en este modelo de empresa como solución para salir del desempleo”, y que las empresas de Economía Social “están ofreciendo soluciones innovadoras, convirtiéndose en un instrumento imprescindible para que los jóvenes recuperen la ilusión y la confianza en el acceso al empleo y al emprendimiento”.
Los representantes de CEPES mostraron su congratulación por la iniciativa del Gobierno de promover una Estrategia de Emprendimiento y Empleo juvenil, basada en la colaboración de todos los actores socioeconómicos que generan empleo y empresas en este país.
El presidente de la patronal de la Economía Social señaló que “es el momento de asumir de forma cohesionada y global el problema del desempleo, por parte de todos los agentes institucionales, sociales y económicos, públicos y privados, que participamos en diferente medida en el mercado de trabajo español”.
Pedreño: "España no puede perder toda una generación"
Las medidas que ha presentado CEPES al Ministerio de Empleo y Seguridad Social (descargar aquí documento) tienen como objetivo potenciar el empleo entre los jóvenes, generando la ilusión y confianza que necesita este colectivo.
Pedreño insistió: “España no puede perder toda una generación, hay que acabar inmediatamente con la precariedad, con las altas tasas de temporalidad en el empleo asalariado y con la alta rotación laboral”. Las medidas presentadas van en la línea, entre otras, de posibilitar el relevo generacional, incorporando nuevos trabajadores que sustituyan a aquellos que finalizan su vida laboral, y medidas que potencien la incorporación de jóvenes en empresas o que faciliten la creación de nuevas iniciativas empresariales, añadió el presidente de CEPES.
Implicación personal de los trabajadores
El presidente de CEPES recordó también que las empresas de Economía Social representan un modelo de empresa donde en la mayoría de las ocasiones el capital está en manos de los trabajadores y por tanto implicados directamente con el proyecto empresarial.
En otros casos, este modelo empresarial es el único que tiene fórmulas específicas que facilitan la inserción de colectivos en exclusión en el mercado laboral.
Gracias a la implicación personal de los trabajadores en el proyecto empresarial, junto con otros valores como la democracia en la toma de las decisiones, o la distribución de los beneficios de manera colectiva o para el cumplimiento del fin social, estas empresas tienen una flexibilidad mayor para adaptarse a situaciones desfavorables que otros modelos, contemplándose el cierre y el despido como último recurso.