10/09/2009
El IV Congreso del Rulescoop, que se celebra en Montevideo, exhorta a universidades y entidades de economía social a trabajar juntos por la proyección del sector
Universidades y agentes de la economía social deben trabajar juntos a favor de la proyección de esta otra forma de hacer empresa a través de los valores y de la eficiencia. Esta es una de las principales conclusiones del IV Congreso de la Red RULESCOOP, que se está celebrando estos días en Montevideo (Uruguay), organizado por la Unidad de Estudios Cooperativos (UEC) de la Universidad de la República.
El Congreso reúne a universidades latinoamericanas y europeas en la búsqueda de analizar las realidades del cooperativismo y el asociativismo y, más concretamente, de debatir sobre las herramientas y metodologías que puedan contribuir a su desarrollo y, con ello, a la mejora de la calidad de vida y la cohesión social de las regiones.
Abrió el Encuentro el rector de la Universidad de la República, Rodrigo Arocena, acompañado por el pro rector de Extensión, Humberto Tommasino; el decano de la Facultad de Ciencias Económicas, Walter Rossi, y el coordinador de la UEC, Gerardo Sarachu.
A continuación, el profesor Carlos Schmidt, de la Universidad Federal de Río Grande do Sul, pronunció la conferencia inaugural, concluyendo que la crisis económica “exige espacios para las alternativas, y la economía social tiene suficientes ejemplos con los que ocupar ese espacio”.
Tras la conferencia inaugural, el Encuentro se ha estructurado en una serie de talleres, sobre temas de mercados, intercooperación y redes asociativas, políticas públicas y participación democrática de los trabajadores. En los distintos talleres han participado, por parte española, la profesora Gemma Fajardo, de la Universitat de València, quien realizó un análisis comparado de la sociedad cooperativa europea y la sociedad privada europea, como instrumentos de intercooperación en la Unión Europea; la profesora Pepa Senent, de la Universitat Jaume I, que explicó la necesidad de que las cooperativas integren en su agenda medidas que favorezcan la presencia equilibrada de mujeres y hombres en sus órganos de representación y de dirección, y el catedrático Marco Antonio Rodrigo, de la Universidad del País Vasco, que hizo una aproximación a las cuestiones de índole tributario que afectan a las cooperativas, poniendo de relieve las peculiaridades y especiales dificultades que afectan a las entidades de economía social en este ámbito, y la importancia de las políticas públicas de formento de estas entidades.
El programa del Encuentro ha incluido también un panel sobre “Autonomía y autogestión en la economía social y las distintas formas de asociativismo”, que ha contado con la participación de la mutualidad española Divina Pastora. Dicho panel ha sido moderado por el director general de la Fundación Iberoamericana de la Economía Social (FUNDIBES) y vicepresidente de CIRIEC-España, José Mª Pérez de Uralde.
Este viernes se clausura el Encuentro, en el que se ha tenido oportunidad también de conocer los informes finales de los talleres temáticos del Curso Taller de Cooperativismo y Asociativismo de la UEC, por parte de los jóvenes alumnos.
Solidaridad y eficiencia
El rector Arocena, en la inauguración del Encuentro Rulescoop en Montevideo, realizó un interesante discurso, en el que lamentó que a pesar de la profundidad de la crisis “la hegemonía ideológica sigue estando en el mismo lugar”, sin llegar a vislumbrarse alternativas profundas en las agendas actuales. Argumentó que son “tiempos difíciles” para la economía social y solidaria “y para la solidaridad en su conjunto”. Sin embargo, es en estos tiempos cuando debe analizarse la historia, según Arocena, “para aprender de los fracasos y retomar los fundamentos”. En este sentido, valoró que el cooperativismo tiene “la fuerza de la autonomía, y de la vocación por construir desde dentro y desde abajo”.
Entre las experiencias de éxito, el rector citó la del Grupo Mondragón, del que manifestó: “Aquí hay un gran fuerza ideológica, de valores que sin ellos no se compensan las dificultades”, ya que “el diferencial del compromiso y de los valores es clave para afrontar el mercado”.
Por último, el rector de la Universidad de la República identificó las oportunidades que debe aprovechar la economía social, entre las cuales citó “la combinación de la vocación igualitaria de la economía social con el trabajo y el aprendizaje colectivo y, más concretamente, la combinación del conocimiento universitario con el emprendimiento solidario”. Y concluyó: “No basta con la idea de solidaridad, sino que cabe demostrar que el asociativismo es más eficiente, con el fin de ganar la lucha por la transformación de la sociedad”.